viernes

Derechos Humanos de los homosexuales... y de sus padres

¡Estoy sorprendida!

Muy sorprendida porque, cuando hace ya tiempo, publiqué el Decálogo para Padres de Hijos Homosexuales recibí casi inmediatamente muchas cartas de felicitación, de agradecimiento, de sorpresa, de “qué bien, ya era hora”.

Y luego cuando invertí los papeles, es decir, cuando escribí sobre lo que consideraba correcto o incorrecto en cuanto a algunas actitudes de los hijos homosexuales para con sus padres heterosexuales, ¡nada!

¿Qué sucede?... pues no lo sé con certeza, pero lo intuyo.

Parece que a los hijos, tanto homosexuales como heterosexuales, no les gusta que les digan algunas verdades sobre algunos comportamientos errados para con sus padres…pero, eso sí, les encanta que les digan cómo deben comportarse los padres con ellos.

¡En este asunto también hay muchas cosas de las que hablar y creo que es necesario hacerlo!

He recibido varias cartas de madres o padres que, suponemos han criado a sus hijos con amor y con dedicación, y escriben desesperados porque sus hijos o hijas homosexuales adoptan un comportamiento muy agresivo, insolente y hasta irrespetuoso con sus padres cuando conocen de su homosexualidad; cartas que me dicen del sufrimiento de estos padres porque simplemente los hijos homosexuales decidieron no dirigirles más la palabra, o porque se fueron de la casa sin ninguna explicación o porque tienen una pareja que se convierte de pronto en la única persona a la que obedecen y siguen ciegamente y cierran su corazón y su mente a las opiniones de todos los demás, incluidos sus padres.

Felizmente nosotros tuvimos y tenemos la gran suerte de que nuestra hija tiene una novia que es un ser humano increíblemente bueno, una mujer justa que jamás insistió en alejar a nuestra hija de nosotros, sus padres, una mujer que le pidió comprensión y paciencia aun en nuestros tiempos de alejamiento y de discusiones sordas. Ella, la novia de mi hija, siempre tuvo la lucidez suficiente como para saber que la familia, no debía destrozarse por ningún motivo.

Cuando los padres hacemos reclamos, exigimos el mismo respeto y la misma comprensión que los hijos piden de nosotros.

Tengo una seria preocupación con respecto a este asunto y es que muchas veces las minorías, étnicas, homosexuales, u otras, tienden a considerarse algo “víctimas” y algo “especiales” por sus intrínsecas diferencias y luego son estas mismas minorías las que, por estas consideraciones erradas, excluyen a las mayorías….¿invertimos los papeles solamente por considerarnos “pocos”, “raros”, o especiales?

¿Es correcto, por ejemplo que las lesbianas o los transexuales o los travestis, u otros grupos minoritarios excluyan a los heterosexuales por ser cómo son, porque no son como ellos?

Muchas veces estas consideraciones erradas de las minorías hacia las mayorías, o viceversa, han sido detonantes de luchas encarnizadas, de violación de los derechos humanos inherentes a todos: minorías o mayorías, mayorías o minorías.

Hijas homosexuales, hijos homosexuales, madres y padres de hijos homosexuales, ya es hora de comprender que: ¡los derechos humanos, en su más amplia acepción, nos competen a todos, seamos minorías o mayorías!

El respeto de los padres a los hijos homosexuales o no, exige también que los hijos respeten a los padres y, entre otras cosas además, comprendan su sorpresa e ignorancia cuando se enteran de que sus hijos son homosexuales, bisexuales, travestis o pertenezcan a cualquier otro grupo minoritario.

Y en mi búsqueda personal para que esto se haga realidad algún día, para lograr, poco a poco, que vivamos en paz y como seres humanos dignos, es que escribo este blog.

3 comentarios:

Solete dijo...

Totalmente de acuerdo, el respeto debe ser recíproco.

Ally** dijo...

wowww.... no escribire ninguna palabra fuerte por que como madre se que no te gustaria pero aaggg habai escrito mucho y cuando lo envie blogger me dijo que no pudo realizar mi peticion y se borro todo!!!!

en fin..
yo soy una seguidora de tu blog y realmente me emocione muchisimo cuando vi entrada mas reciente, la verdad yo no te escribi en la entrada del decalogo por que ocmo veo que es antigua no crei que fueras a leerlo, de hecho pense pro un cruel minuto que tal vez habias dejado botado el blog :(
pero veo que no es asi!!! :D

en primera, yo estoy completamnete deacuerdo con los dos, por que asi como nuestrso apdre sestan obligacdos a entendernos ya poyarnos, asi nosotros tambien debemos entender que no es facil para ellos y a ser pasientes :)

mira, tal ve o tambien se la razon por la cual no te han escrito mucho cuando el decalogo fue para nosotros: se que como madre es dificil entender el ehcho de que existan madres que no deseen lo mejor para sus hijos, pero derepente es asi.
las relaciones de "familia" son solo eso: relaciones como cualquier otra, yo se que deberian ser mucho ma fuertes que ninguna otra, pero como toda relacion se va formando con el tiempo, es como una plantita qeu se debe ir regando, por que existen madres que no han deseado serlo, tal solo les llega... es algo cruel pero, es asi yo lo he vivido bastante cerca, no de mi experiencia por que gracias a dios mi madre me acepto y todo esta bien, pero realmente se de casos que independientemente de la orientacioon sexual de sus hijos no merecen ni el minimo respeto por ellos.

aunque bueno, no digo que ese sea el caso de todos, yo se que no,
y si tienes razon, por que si hay muchos chiquillos picota que les gusta que hables de loq ue hacen mal los padres pero no de loq ue hacen mal ellos mismos.
uno tiene que aceptar sus propios errores,, y darle tiempo al tiempo, :)

Bueno, espero que este comentario si aparesca xD siga escribiendo por que la seguire leyendo!!

adios!!

allylez.blogspot.com

ayla dijo...

Por supuesto que los hijos tienen que tener respeto hacia sus padres, como lo hace cualquier hijo heterosexual, esto no se trata de género, sino de principios, los hijos tienen que respetar a los padres y a la sociedad en general, sean o no homosexuales, el respeto ante todo ante los padres y desde luego nosotros también tenemos que respetar a nuestros hijos, mi hijo es homosexual, nos tomó tiempo aceptarlo abiertamente, pero gozamos de una cominucación maravillosa, nuestro hijo nos adora y nosotros igual siempre hemos ido con el lems "El que da más amor gana" en este caso lo daos nosotros y tenemos a nuestro hijo siempre con amor hacia nosotros